MARTES 15 DE JUNIO DEL 2010.-
Algunas personas gastan horas y energías en su vida, en busca de una oportunidad que haga de sus existencias algo fuera de lo común. La verdad que el hecho que su vida sea mejor y que su existencia sea emocionante no depende de las oportunidades que les ofrezcan sino de las “decisiones” que se tomen.
Nuestras decisiones revelan nuestro verdadero enfoque de la vida. La fotografía mas premiada no es aquella que presenta una imagen ideal, sino aquella en la que el fotógrafo pudo enfocar en el momento preciso. Puede ser que estés frente al mejor momento y oportunidad de tu vida, pero si tu enfoque no es correcto no obtendrás una bella fotografía de tu vida. A lo mejor estas pasando el peor momento de tu existencia, pero obtendrás el mejor provecho para tu vida, solo dependerá de tu enfoque. Enfoque podemos definirlo como el mapa mental o paradigma, es como vemos y creemos que son las cosas.
Descubrir nuestro enfoque de la vida es una tarea que demandara un tiempo de profunda introspección, además de darnos una “ducha” de sinceridad y desechar aquellas cosas que no son beneficiosas. Para tener “victorias públicas” debemos aprender a tener “victorias privadas”, los ajustes mas fuertes son internos, por ejemplo, modificar hábitos, valores y principios. Nuestro enfoque de la vida, es el resultado de nuestra misión y propósito de existencia, los cuales descansan sobre la base de nuestros principios y valores centrales.
Aparentemente los principios del post-modernismo han ingresado sutilmente a las Empresas, convirtiéndola en una organización impersonal e indiferente a las necesidades de las personas e inclusive haciéndola individualista y egoísta. Tanto así que las empresas giran alrededor del trabajo y la producción y no de las personas, quien es una parte fundamental en esta cadena ya que la motivación de cada trabajador depende de sus necesidades satisfechas y también del entorno que les rodea.
Una empresa enfocada en si misma, como estructura, es una organización dominada por el orgullo y la satisfacción en sus logros, que por lo general la convierten en fría y poco empática, pues confía solo en logar tener más sin importar lo que costará realizarlo, y donde las circunstancias son miradas solamente desde la perspectiva laboral y no humanas. Las personas enfocadas en si mismas, solo buscan su propio bienestar sin importar los demás; este tipo de gente solo busca su placer y felicidad. Por lo tanto, en todo lo que has adquirido, lo que tienes y poseerás, ¡No pierdas tu Enfoque!
Mirko Leandro
Mtr. Teología y Ciencias